Chinchilla siempre ha sido agradecida con los fotógrafos. Por ejemplo,
de La Plaza de la Mancha, que se ha llamado de La Constitución y luego de José
Antonio, se conservan placas históricas que permiten escudriñar el paso del
tiempo. La pantalla del ordenador nos deja compararlas y jugar a descubrir las
diferencias.
La fuente de la Plaza, que estaba más centrada, parece ir moviéndose de forma caprichosa hacia la fachada plateresca del Ayuntamiento. Supongo que depende de los objetivos que usaron los fotógrafos. Propongo comparar dos fotos concretas. Una es de la familia Belda y puede encontrarse fácilmente en el archivo http://www.fotografiabelda.com. Conviene proveerse de una lupa y de más tiempo del que yo dispongo para el análisis. Sabemos que en esa fotografía hay un rótulo sobre el arco que da acceso a la calle Corredera (ahora calle Fernando Núñez Robres). Es fácil que tenga que ver con el Mesón de las Peras que estaba a la izquierda. Hay un remolino de mujeres en torno de la fuente, aguardando su turno mientras intercambian chascarrillos. El abuelo Belda empuñó la cámara en torno a 1905 y es probable que la instantánea sea de las primeras. La otra fotografía la tomó el portugués António Passaporte. Está fechada entre 1927 y 1936. Podemos apreciarla con todo detalle y sin miedo porque pertenece al Ministerio de Cultura que la adquirió, con el archivo Loty, y las otras 44 fotografías captadas por Passaporte en la ciudad. Se encuentra rápido marcando Loty + Chinchilla en el buscador. Utilizó el mismo encuadre que Belda, o muy parecido para la Plaza. Sigue habiendo mujeres y también algunos hombres en torno a la fuente. Más gente se arremolina en los edificios anexos a la Iglesia que desaparecieron en la Guerra. En su lugar encontramos las incalificables columnas que Fullahondo impuso en la rehabilitación de la Plaza en los años setenta. Lo suyo sería tirarlas y reconstruir los edificios. Desde los años 80 quiere hacerlo el Ayuntamiento. A veces cuesta demasiado reparar una mala decisión. Pero, en fin, ahí están las fotos para devolvernos lo que es de todos. Miren, comparen y luego compartimos los hallazgos.
La fuente de la Plaza, que estaba más centrada, parece ir moviéndose de forma caprichosa hacia la fachada plateresca del Ayuntamiento. Supongo que depende de los objetivos que usaron los fotógrafos. Propongo comparar dos fotos concretas. Una es de la familia Belda y puede encontrarse fácilmente en el archivo http://www.fotografiabelda.com. Conviene proveerse de una lupa y de más tiempo del que yo dispongo para el análisis. Sabemos que en esa fotografía hay un rótulo sobre el arco que da acceso a la calle Corredera (ahora calle Fernando Núñez Robres). Es fácil que tenga que ver con el Mesón de las Peras que estaba a la izquierda. Hay un remolino de mujeres en torno de la fuente, aguardando su turno mientras intercambian chascarrillos. El abuelo Belda empuñó la cámara en torno a 1905 y es probable que la instantánea sea de las primeras. La otra fotografía la tomó el portugués António Passaporte. Está fechada entre 1927 y 1936. Podemos apreciarla con todo detalle y sin miedo porque pertenece al Ministerio de Cultura que la adquirió, con el archivo Loty, y las otras 44 fotografías captadas por Passaporte en la ciudad. Se encuentra rápido marcando Loty + Chinchilla en el buscador. Utilizó el mismo encuadre que Belda, o muy parecido para la Plaza. Sigue habiendo mujeres y también algunos hombres en torno a la fuente. Más gente se arremolina en los edificios anexos a la Iglesia que desaparecieron en la Guerra. En su lugar encontramos las incalificables columnas que Fullahondo impuso en la rehabilitación de la Plaza en los años setenta. Lo suyo sería tirarlas y reconstruir los edificios. Desde los años 80 quiere hacerlo el Ayuntamiento. A veces cuesta demasiado reparar una mala decisión. Pero, en fin, ahí están las fotos para devolvernos lo que es de todos. Miren, comparen y luego compartimos los hallazgos.
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